Los cambios en el mundo empresarial suelen manifestarse en el sistema educativo, y viceversa. Como escribe Forbes sobre el futuro del trabajo, por ejemplo, las escuelas están preparando a los estudiantes con las habilidades que pueden ayudarles a prosperar en los lugares de trabajo remotos o híbridos del siglo XXI. A los trabajadores de hoy se les exigen conocimientos tecnológicos y digitales, y esa formación suele comenzar en la escuela.
Es importante que los profesionales no den por sentadas estas lecciones. Además de la alfabetización digital, o incluso de la creatividad y el ingenio, hay otras competencias adquiridas en la escuela que a menudo pueden ser cruciales para labrarse una buena carrera profesional. En este artículo analizamos cuatro lecciones que pueden transmitirse del aula a la sala de juntas.
Críticas para mejorar
Los comentarios negativos siempre son duros de oír. Sin embargo, los mejores profesores suelen presentar una rúbrica de calificación clara y una explicación detallada para que sepas cómo puedes mejorar. Esto ayuda a los estudiantes a comprender cómo evitar estos errores en el futuro y obtener mejores notas.
Del mismo modo, como ya comentamos en un artículo anterior sobre Cómo comunicar críticas, es posible que sus supervisores se dirijan a usted cuando su rendimiento laboral no esté a la altura de las expectativas. Es importante reconocer cómo están distribuyendo su tiempo para corregirte. Esto le indica que la crítica pretende mejorar la calidad de su trabajo y no invalidar sus esfuerzos. Cuando tú mismo te conviertas en jefe de equipo, es fundamental que recuerdes cómo te has sentido al recibir críticas de tus profesores y supervisores, para que puedas dirigir eficazmente a los miembros de tu equipo sin acabar con la motivación.
Importancia de la colaboración
Un buen entorno de aprendizaje permite a los estudiantes conocer a gente diferente y aprender a colaborar en proyectos de grupo. Cuando existe una competencia sana y herramientas de colaboración, los alumnos pueden sentirse motivados para estudiar más e incluso ayudar a sus amigos a rendir mejor en clase. Los estudiantes pueden compartir el acceso a lecturas más digeribles en la aplicación para compartir apuntes Studocu y acceder a resúmenes realizados por otros estudiantes que entienden las lecciones de una forma única o más fácil. Esto ayuda a todos a ser más productivos y a obtener mejores notas.
Pero la importancia de la colaboración no acaba en el aula. Puede que tengas lagunas de conocimientos incluso como profesional, o campos específicos en los que destaques en comparación con tus compañeros. En espacios compartidos, como reuniones o proyectos, puedes incorporar distintas herramientas tecnológicas para potenciar la colaboración. No tengas miedo de compartir ideas de trabajo en plataformas oficiales como Slack, fuera de las conversaciones cara a cara, y anima a tus compañeros a hacer lo mismo. Tú y tus compañeros de trabajo también podéis optar por compartir notas de talleres y seminarios de formación en Google Workplace para que cualquiera del equipo pueda acceder a ellas.
Técnicas de organización para aumentar su productividad
Es normal que las exigencias y la carga de trabajo aumenten a medida que los estudiantes suben de nivel en la escuela. Para mantenerse al día, se anima a los estudiantes a desarrollar habilidades organizativas para que puedan entregar a tiempo todas sus tareas y requisitos escolares. Muchos estudiantes utilizan carpetas y diarios codificados por colores para controlar todas sus responsabilidades.
Está demostrado que organizar adecuadamente tus archivos y pensamientos ayuda a aumentar tu productividad. En el lugar de trabajo, puedes organizar tus notas en la aplicación de toma de notas Evernote e incluso hacer un seguimiento de todos tus proyectos en la aplicación de productividad freemium Notion. El diseñador de productos Monirul Islam Robin señala que incluso se puede utilizar Notion para colaborar con equipos, ya que su interfaz personalizable permite organizar mejor las tareas y gestionar los plazos conjuntos.
Desarrollo en retos
Las escuelas retan a los estudiantes a salir de su zona de confort participando en clase, uniéndose a un club del campus u otras actividades extraescolares. Esto les ayuda a ampliar su red de contactos y su confianza social.
Del mismo modo, los lugares de trabajo pueden ser una oportunidad para ampliar su red profesional. Steven Patchin, director de servicios profesionales de la Universidad Tecnológica de Michigan, explica que puedes ponerte en evidencia ofreciéndote voluntario para un puesto de liderazgo o incluso iniciando una conversación con tus compañeros de trabajo. Al principio pueden suponer un reto, pero, como afirma Patchin, «el verdadero crecimiento personal y profesional empieza donde acaba tu zona de confort».
Las habilidades duras y blandas aprendidas en la escuela pueden ser a menudo la base de mejores habilidades en el lugar de trabajo. Cuando aprovechas al máximo estas lecciones del aula en tus propias salas de juntas o reuniones, puedes fomentar tu crecimiento y desarrollo profesional y construir una carrera de éxito. Si desea más consejos sobre coaching empresarial y personal, consulte nuestros otros blogs en Dr Weber Coaching.